El lenguaje no verbal o gesticular es una de las principales señas de identidad que caracteriza a muchas personas. Realizar gestos ayuda en el contexto de una conversación a que el emisor transmita un mensaje más claro a sus receptores.
En la cuestión de los idiomas, gesticular puede facilitar la pronunciación de palabras de una segunda lengua. Según varios estudios, los gestos que reproducimos a través de las manos para remarcar la tonalidad y la duración de un tono léxico pueden facilitar el aprendizaje de la pronunciación de palabras en una segunda lengua.
Una forma divertida de aprender estas expresiones es observando a los actores de tus películas y series de televisión favoritas. Por supuesto ya sabes que estos son recursos útiles para entrenar tu oído en un idioma extranjero, por ejemplo para aprender vocabulario, perfeccionar tu acento, pronunciación y entonación. Pero no hay que olvidar el lenguaje corporal, presta mucha atención a los movimientos, a sus expresiones faciales y de sus manos.
Eso sí, hay que tener mucho cuidado y enterarse antes de los diferentes gestos de cada cultura y país. Usar los gestos correctos, o incorrectos, puede construir o romper la relación que estableces con las persona. Si desconoces sus costumbres, puedes ofender a alguien por eso ten cuidado y aprende el lenguaje corporal de otra cultura para ganar credibilidad y entender fácilmente a las personas que conoces.
Así, la próxima vez que mires una película, serie de televisión o hables a través de la cámara web con tu compañero de intercambio de idiomas, presta mucha atención a los movimientos que hacen las personas que estás viendo porque usar los gestos correctos son casi tan importantes como usar las palabras correctas.